Un minorista de fotografía holandés cambia de Wetlab a Drylab.
En el mundo de la impresión fotográfica, los laboratorios húmedos eran la norma. Pero con la llegada de la tecnología de laboratorio en seco, cada vez son más los minoristas fotográficos que se pasan a ella.
Uno de estos minoristas de Holanda ha realizado la transición del laboratorio húmedo al laboratorio seco, con la ayuda de la solución de flujo de trabajo personalizado de BlueFX.
El reto consistía en integrar a la perfección el nuevo laboratorio seco con el antiguo laboratorio húmedo, así como dar cabida a los pedidos entrantes de múltiples fuentes.
Ahí es donde BlueFX llegó. Con nuestra solución de flujo de trabajo personalizada, el minorista pudo recibir pedidos desde su quiosco Pixsy, así como dos flujos de descarga web, e imprimir de forma inteligente tanto en las máquinas antiguas como en las nuevas, húmedas y secas.
Pero, ¿y si el tamaño de impresión no cabe en ninguna de las dos impresoras? Envíelo al plotter. Con un flujo de trabajo digital automatizado, el minorista tiene ahora la flexibilidad de añadir más SureLab D700 o sustituir el antiguo laboratorio húmedo Frontier.
La escena está preparada.
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