Migración de un laboratorio húmedo a un laboratorio seco: Perspectivas y estrategias para laboratorios del Reino Unido, Suecia, Dinamarca y Holanda
Si está pensando en cambiar de un laboratorio húmedo a un DryLab, no está solo. Laboratorios de todo el Reino Unido, Suecia, Dinamarca y Holanda se enfrentan al mismo reto.
Una vez convencidos de las ventajas de los laboratorios secos, hay que decidir cuándo se va a pasar al nuevo sistema y si se pueden seguir proporcionando resultados tanto de laboratorio húmedo como de laboratorio seco durante el periodo de transición.
{Una cuestión importante es gestionar las expectativas del cliente durante la transición y evitar la mezcla de tipos de impresión.}
Existen dos estrategias para migrar a un DryLab: puntos de ruptura escolares individuales o una transición a todo el sistema. Ambas tienen pros y contras, por lo que es importante sopesarlas cuidadosamente.
En este enfoque, ambos flujos de trabajo funcionan hasta que se migran todas las escuelas.
Se trata de un enfoque más gradual, pero requiere más esfuerzo, costes adicionales continuos y existe la posibilidad de que se produzcan confusiones.
Este enfoque ofrece una ruptura más limpia, pero requiere un mayor cuidado para garantizar que todos los elementos del proceso de producción funcionen a la perfección.
El calendario también es fundamental, ya que la transición debe tener lugar al final del curso académico.
A la hora de cambiar a un DryLab, es importante destacar las ventajas, entre las que se incluyen:
La transición de los laboratorios húmedos a los secos puede suponer un reto, pero las ventajas son evidentes. Si conocen los retos, las estrategias y las ventajas del cambio, los laboratorios podrán afrontar el proceso con mayor confianza y éxito.
BlueFX puede ayudarle en esa transición.